Pacific Wine Country

La ciudad de Los Ángeles siempre se mueve entre el sueño y la realidad. Antaño un puesto de avanzada colonial casi olvidado, el pueblo se transformó en un paraíso agrario antes de reinventarse a sí mismo como la meca del cine. Quizás ninguna otra ciudad debe tanto a las innovaciones tecnológicas del siglo XX, desde el automóvil al avión. No es de extrañar que Los Ángeles sea descrita a menudo como la “máquina de sueños”. En Los Ángeles, la reinvención es una forma de vida. Es más, este talento para el cambio ha creado una ciudad con una rica diversidad étnica y una activa vida cultura . LA es la fuente de las tendencias que migran a través del país y luego al mundo. ¿Dónde más puede disfrutar de un taco tailandés o tomar un burrito kosher? O ¿viajar desde los rascacielos del centro a las playas de Malibú e ir de compras a Beverly Hills por el camino?

Conocido como un lugar de infinita belleza, con los locales afables y un sol sin fin, San Diego se ha convertido en una de las ciudades favoritas de Estados Unidos. Ubicada en el extremo suroeste de California, cerca de la frontera de México, San Diego tiene un toque intercultural, parte mediterráneo impregnado por el sol y por el sesgo de un pueblo al sur-de-la-frontera y parte por ser la quintaesencia de una ciudad playera de California.

La historia de San Diego está arraigada a su pasado Español y Mexicano. San Diego fue declarada capital del alto y bajo Baja California sólo cuatro años después de que México obtuviera su independencia en 1821. Menos de treinta años después, los Estados Unidos declaró la guerra a México y en menos de dos años, se firmó el Tratado de Guadalupe Hidalgo para la creación de las actuales fronteras entre México y Estados Unidos.

La ciudad sigue prosperando con una población superior a un millón. Atracciones de renombre mundial como el Zoológico de San Diego, el Instituto Salk, Sea World, La Jolla y en la Bahía de San Diego el Puente de Coronado han creado una fuerte industria turística de la zona. Pero sin duda, lo que atrae a visitantes de todo el mundo es la impresionante belleza natural de la ciudad, su soberbia línea costera y un clima casi perfecto.

“Bienvenidos al Paraíso”, es una expresión adecuada para aquellos que visitan la ciudad costera de Santa Bárbara. Llamada la Riviera Americana, Santa Bárbara es un lugar donde la comida, el arte, la historia, la moda, el vino y el sol se mezclan para crear una experiencia maravillosa y única para el visitante. Encantadores edificios de estilo español y árabe adornados de buganvilias de colores brillantes, playas bordeadas de palmeras, un clima Mediterráneo templado, cafeterías con encanto y un antiguo establecimiento de playa son algunas de las razones estéticas para visitar Santa Bárbara.

La “Reina de las Misiones”, la Vieja Misión de Santa Bárbara se remonta a los años 1700 cuando la misión fue construida para llevar el cristianismo a los indios Chumash. La Vieja Misión es ahora una enseña histórica de California y una de las atracciones más populares de la zona.

Justo en las afueras de Santa Bárbara, se encuentra el Valle de Santa Inés, que es el hogar de numerosas bodegas de renombre mundial. La belleza de las espectaculares montañas, valles y árboles de roble sólo es superada por los ricos sabores de los vinos producidos en la zona.

Como asentamiento americano más antiguo de los Rockies, Astoria ofrece una rica historia para su exploración. Fue visitada por primera vez por el Capitán Robert Gray en 1792, por el Cuerpo del Exploración de Lewis y Clark en 1805, y más tarde por miles de pioneros aventureros. Ahora es su turno para experimentar la emoción de explorar Astoria.

En un radio de 20 millas, se pueden ver decenas de atracciones interesantes, como Fort Stevens State Park, Fort Astoria, Heritage Center Museum, Flavel House Museum, Fighters Uppertown Museum, Columna Astoria y el Museo Marítimo del Río Columbia, sede de uno de las mejores exposiciones de modelos de barcos y artefactos náuticos de la nación.

Astoria ofrece otros descubrimientos divertidos, como casas históricas de época victoriana y el bello puente de Astoria de 4,1 millas de largo.

Victoria exudes old-world charm and fragrant, colorful flowers are everywhere. Founded in 1843 by James Douglas of the Hudson’s Bay Company, the city was first known as Fort Victoria. By 1848, Vancouver Island was a British colony and Victoria was its capital.

In 1858, Victoria was a tent city and the base for some 25,000 prospectors on their way to the Frasier River gold fields. When Vancouver Island was incorporated with mainland British Columbia in 1868, Victoria became the capital of the entire province.

Although it’s a port city, Victoria is not as industrially oriented as Vancouver. The harbors, especially Inner Harbour, are dotted with pleasure craft, ferries and floatplanes. The city is renowned for its beautiful gardens, charming houses and very British feel.

Vancouver, a bustling west coast seaport in British Columbia, is among Canada’s densest, most ethnically diverse cities. A popular filming location, it’s surrounded by mountains, and also has thriving art, theatre and music scenes. Vancouver Art Gallery is known for its works by regional artists, while the Museum of Anthropology houses preeminent First Nations collections.