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Una de las mejores cosas de Boston es que se puede conocer caminando. Así que si le interesa la historia y quiere pasear por el Camino de la Libertad pasando por algunos de los lugares más notables de interés turístico, tiendas, galerías de arte de la ciudad o visitar el fantástico Acuario de Nueva Inglaterra, todo está a sólo unos minutos. ¿Por qué no vienen a bordo de la réplica de la nave Boston Tea Party, o para algo más fuerte, está el famoso bar de televisión, Cheers, ¡Salud!

Reduzca una marcha a medida que explora Charlottetown con sus coloniales y victorianas calles arboladasde tiendas y cafeterías, y su tranquila atmósfera de campo. O salga a explorar el PEI, como se le conoce por aquí – los ondulantes paisajes verdes, dunas y acantilados de arenisca roja. Y asegúrese de parar para un almuerzo de langosta ya que la isla es famosa por sus mariscos.

Sydney se encuentra en la Isla Cape Breton, un lugar de belleza agreste natural, que tiene ecos de las Tierras Altas de Escocia que le dieron a la provincia su nombre. Las calles arboladas de la Ciudad Vieja están salpicadas de edificios de los siglos XVIII y XIX, mientras que el paisaje interior de montañas, valles, lagos y ríos están esperando a ser explorado.

Halifax fue fundada en 1749 y hay historia y patrimonio en cada esquina. Eche un vistazo a los lugares de interés de la ciudad en un coche de caballos o en la cubierta superior de un autobús Británico; sumergirse en la historia marítima, incluida la conexión del Titanic con la ciudad; o salir hacia la escénica Peggy’s Cove, con su faro y las casas pintadas de vivos colores para un almuerzo maravilloso de langosta.

La ciudad más grande de Maine ha sido un puerto importante desde el siglo XVII y para una degustación de su historia, pasee por las calles empedradas del barrio Old Port Exchange, sus edificios de ladrillo degradado ahora repletos de tiendas y restaurantes. La ciudad cuenta con algunos buenos museos y también es una gran puerta de entrada a los impresionantes paisajes marinos de la costa rocosa de Maine.

Desde mediados del siglo 19 hasta la caída de la bolsa en 1928, este encantador resort era el rincón de los ricos y famosos de América quienes viajaron hasta aquí en yate privado para veranear. Y ahora es el turno de usted para explorar las tiendas de artesanía y boutiques y descubrir algunos de las 35,000 hectáreas de Parque Nacional de Acadia – sus caminos tipo zigzag son simplemente perfectos para andar en bicicleta, montar a caballo y caminar.

Una de las mejores cosas de Boston es que se puede conocer caminando. Así que si le interesa la historia y quiere pasear por el Camino de la Libertad pasando por algunos de los lugares más notables de interés turístico, tiendas, galerías de arte de la ciudad o visitar el fantástico Acuario de Nueva Inglaterra, todo está a sólo unos minutos. ¿Por qué no vienen a bordo de la réplica de la nave Boston Tea Party, o para algo más fuerte, está el famoso bar de televisión, Cheers, ¡Salud!